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Tras varias horas de viaje, el Grupo Misionero «Nuestra Señora de Luján» arribó al Paraje Esteros (Pcia. Santiago del Estero), donde fueron recibidos por integrantes de dicha comunidad.

Momento de emoción y eternos abrazos, entre grandes y chicos, fue el común denominador de la jornada, donde los misioneros de mayor experiencia se reencontraron con sus «viejos» amigos.

Por otro lado, las caras nuevas de la misión -respetando los tiempos de los anfitriones- comenzaron a presentarse y, casi de manera inmediata, comenzó a fluir la relación.

Con el objetivo de optimizar los tiempos en Esteros, inmediatamente el grupo misionero del Colegio Nuestra Señora de Luján comenzó a desarrollar las diferentes tareas programadas.

Divididos en grupos de trabajo, mientras algunos misioneros realizaban juegos recreativos con los chicos, otros iniciaron las reparaciones edilicias en el Jardín de Infantes y tambien ayudaron en la cocina para preprar unas ricas empenadas santiagueñas.