Uno de los lindos momentos que tiene la Misión a Esteros es, sin dudas, la recorrida por cada una de las humildes y precarias viviendas del Paraje, que lleva adelante el Grupo Misionero «Nuestra Señora de Luján».
Allí, los misioneros, guiados por la incansable «Nina», recorren el monte santiagueño para visitar a los lugareños y poder compartir un momento de oración, donde no faltan los dulces mates, unas ricas tortillas, recuerdos, vivencias y momentos de mucha alegría.
Con un corazón abierto y ofreciendo todo lo que tienen, los vecinos de la comunidad de Esteros siempre esperan la visita de los Misioneros de Tornquist, donde las charlas se hacen extensas y los momentos compartidos quedan grabados para siempre.
«La actividad misionera representa hoy el mayor desafío para la Iglesia y la causa misionera debe ser la primera», dice el Papa Francisco.