Un momento de gran emoción, anécdotas y abrazos interminables, fue el que vivieron las integrantes de la comunidad religiosa del Colegio Nuestra Señora de Luján con la visita de grandes amigos de la región que se hicieron presentes en nuestra ciudad.
«Con gran alegría recibimos la visita de Martín, Susana, Flavio y Marta. Queridos amigos que nos alegraron la jornada y los recibimos como un mimo de Tatita Dios a nuestro corazón, un regalo muy deseado y esperado», señaló la Hermana Marta.
«La excusa fue degustar un sabroso lechoncito. Recordamos gratos momentos compartidos con Susana, en Stroeder, en Tornquist, allá lejos y hace tiempo. Revivimos anécdotas risueñas e insólitas que a la distancia nos arrancaron carcajadas. Vivencias de mi niñez, allá en Maquinchao, mi vocación, fuimos hilando y armando. El tiempo tirano, como siempre, marcó el final de un hermoso e inolvidable momento que esperamos volver a repetir», agregó.